ROCA VIVA Y EL SUSTRATO

                                                                                  ROCA VIVA Y EL SUSTRATO 




LA ROCA


Para nuestro acuario debemos conseguir una roca de calidad, lo más porosa posible, para que tenga espacio para albergar tanto a las bacterias nitrificantes como a las desnitrificantes. Las rocas muy compactas o macizas no son demasiado buenas para albergar al segundo tipo de bacterias ni como morada para la microfauna.
La roca más adecuada para colocar en el acuario es la de origen calcáreo. A pesar de ello, pueden usarse otros tipos de roca, aunque habría que tener dos cosas en cuenta:
- Si son rocas procedente del mar, deberían llevar tiempo dentro del agua. Así podrían usarse rocas volcánicas u otros tipos.
- Si son rocas que no provienen del mar, deberían limpiarse bien y mejor si se tienen varias semanas en remojo para limpiarse y soltar cualquier cosa que puedan llevar.


En las tiendas de acuariofilia podemos encontrar rocas “vivas” provenientes de muchos lugares y dependiendo de su procedencia y calidad, variará mucho su precio.
Rocas de reconocido prestigio para nuestro acuario pueden ser de Fiji o Tonga, aunque en principio cualquier roca calcárea y porosa puede irnos perfectamente para nuestro acuario.




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Otro asunto es el de colocar roca viva o roca muerta. La roca viva es más cara pero ya viene colonizada tanto por bacterias como por infinidad de microorganismos e incluso en muchas ocasiones nos vendrán pólipos de coral. Con el uso de esta roca viva el ciclado de nuestro acuario será bastante más rápido 



Pero también podemos decantarnos por la roca muerta (llamada también roca base) seca, de jardín o incluso fabricada (las llamadas de aragocreto). Estas rocas son mucho más baratas y nos pueden servir como base para las rocas vivas. Con el tiempo estas rocas "muertas" o secas también se colonizarán de bacterias y microfauna, volviéndose rocas vivas. El único inconveniente es que con el uso de mucha roca muerta el ciclado se alargará, ya que son rocas sin vida.

Si quisiéramos empezar un acuario solo con roca muerta deberemos, o bien introducir unas cuantas rocas vivas, o usar las bacterias que venden para este fin. Sea como sea, con mayoría de roca muerta deberemos echar algo de comida cada varios días para que las bacterias puedan alimentarse, ya que si no tienen comida, no pueden sobrevivir, con lo que no se iniciaría el ciclo del nitrógeno.
Esto no suele pasar con roca viva, ya que en ella hay suficiente materia orgánica para alimentarse bien.

La colocación de la roca es una tarea difícil y tediosa. Esta debería quedar colocada de manera que tenga los mínimos puntos de apoyo posibles. De esta forma quedarán menos zonas para acumulación de residuos y más espacio y cuevas para los habitantes, sobre todo peces. También se favorecerá la circulación de agua por todos los lugares del acuario.
Además, si lo que queremos es un acuario de arrecife, habrá que colocarla de manera que quede sitio para poner los futuros corales y que además, que se vea estético.

Un sistema que también queda bien es colocar parte de la roca sobre rejillas, de manera que quede levantada unos centímetros de la arena, dejando apoyadas sobre la arena las piedras necesarias para que nos tapen dicha rejilla. De esta manera, los animales "areneros" podrán pasar por casi toda la superficie de la arena para alimentarse de los residuos.




Referente a la cantidad de roca necesaria para un acuario de arrecife se suele recomendar una cantidad de entre 10 y 12 Kg por cada 100 litros. Esto es solo una referencia y dependerá del tipo de acuario que queramos, de lo cargado que nos guste verlo, de los animales que vayamos a mantener,....
Con algo menos de roca un acuario con una población adecuada puede funcionar perfectamente. Además, hay que tener en cuenta que la mayoría de corales vienen con su propia roca, por lo que no debemos sobrecargar demasiado para tener espacio para ellos.



[b style="color: rgb(51, 51, 51); font-family: Tahoma, Calibri, Verdana, Geneva, sans-serif; font-size: 13px; background-color: rgb(253, 253, 253);"]El sustrato[/b]

El sustrato en el acuario marino tiene también una gran importancia. Aparte de la función estética que nos proporciona una pequeña capa de arena, está también la función filtradora, ya que el sustrato es colonizado por bacterias y otros tipos de microorganismos y animales que nos ayudarán en la limpieza de los residuos que genera el acuario y su alimentación.

Respecto a los espesores de la capa de arena hay opiniones de toda clase. Hay quién prefiere una capa de 1 ó 2 cm, que funcionará solo como efecto decorativo y estético. Una cama de estas características tiene poca función filtradora y posiblemente tenga poca microfauna para mantenerla limpia.

Mucha gente se decanta por capas de entre 3-6 cm. Son los llamados SSB. Una capa con este espesor ya puede albergar bastantes bacterias y microfauna muy variada y útil para el acuario. Pero en ella no hay suficiente profundidad para que haya capas anaerobias (pobres en oxígeno) en donde trabajan las bacterias anaerobias, con lo que se reduce el riesgo que puede tener una capa más profunda ó DSB.

Como última opción está la cama de arena profunda ó DSB. Ésta funciona a partir de 10 cm, y puede llegar hasta los 15 cm ó más. Hay acuaristas que la usan, pero no es demasiado común, ya que ha llegado a dar problemas por encontrarse zonas de "putrefacción" en las capas profundas. Y el tener una cama de este tipo en el acuario principal puede complicarnos un poco la vida, sobre todo si tenemos que desmontar.
Estas camas de arena profundas (DSB) es preferible montarlas en el sump. En este caso se denominan DSBR (“R”de remotas). Así, en caso de problemas, no hay que tocar el acuario principal.

Para mantener las camas de arena en perfectas condiciones, sobre todo el SSB y el DSB necesitaremos incorporar al acuario todo un equipo de limpieza de sustratos. Este equipo puede constar, entre otros, de todo tipo de caracoles, strombus, nassarius, babilonias,...que surcan la arena en busca de residuos o se entierran en el sustrato, removiéndolo continuamente; estrellas del sustrato, ofiuras, ermitaños e incluso las gambas como las Lysmatas ó Stenopus (entre otras), las cuales se pasean por todo el acuario en busca de restos de comida.
Además, hay algunas especies de peces que también son de gran ayuda, como los gobios "Valenciennea". Aparte, la mayoría de lábridos, por la noche, se entierran en la arena, por lo que también la remueven.

Otro punto importante es la granulometría de la arena o tamaño de los granos. Es mejor usar arenas de granulometría fina, de alrededor de 1 mm de tamaño de grano, quizás hasta 2 mm de grano máximo. Arenas más gruesas acumulan mucha porqueria y acaban dando problemas, ya que hay que sifonarlas y la mayoría de bichos "areneros" no se encuentran cómodos.
Granulometrías inferiores son propensas a volar fácilmente con la corriente del acuario, aunque se usan tamaños de grano de hasta 0,5 mm.
Tamaños más finos son usados para el montaje de los DSBR en los sumps.

Los sustratos más usados son la arena de coral y la aragonita. Esta última se reccomienda por su efecto tampón sobre kh y ph. 
Aunque también se puede usar la arena silícea , incluso hay quién ha llegado a usar "marmolina" o marmol molido. Su uso en acuarios marinos no afecta para nada en la posible producción de silicatos, ya que con el ph del acuario marino no puede disolverse. Para ello necesita de ph's bajos (ácidos).


FUENTE :PLANETACUARIO, EL GRAN LIBRO DE LOS PECES DE ACUARIO